Un producto 100 % natural
El proceso de elaboración del bacalao tradicional noruego es completamente natural de principio a fin. El pescado procede de las limpias y frías aguas del mar de Barents y es mundialmente conocido por su sabor puro y extraordinaria textura. Esta extraordinaria materia prima, combinada con una tradición artesanal ancestral, hacen del bacalao tradicional noruego un producto perfecto.
Para elaborar el bacalao tradicional noruego, el pescado se abre y corta en su característica forma triangular para, posteriormente, salarse. La sal sustituye el contenido de agua del pescado, y esta es la razón por la cual el producto acabado contiene una elevada cantidad de este mineral.
Para eliminar este exceso de sal en el bacalao tradicional noruego antes de cocinarlo, basta con rehidratarlo. Puedes controlar fácilmente la cantidad de sal que queda en el bacalao tradicional noruego calculando el tiempo de rehidratación. Otro de sus puntos fuertes es aumenta de tamaño al rehidratarse, lo cual hace que el bacalao pese más al final del proceso.
"La seguridad alimentaria es una parte importante del proceso de producción. Por si fuera poco, el bacalao tradicional noruego es un producto inherentemente resistente como consecuencia del proceso de salazón y desecado", cuenta Jakob.
Tras sacudir la sal, el bacalao tradicional noruego se coloca en pallets de madera y se traslada a una instalación de desecado cuya temperatura, flujo de aire y humedad se controlan manualmente. Es aquí donde el pescado se deja madurar.
"Nos guiamos solamente por el olor, el sabor y la textura para determinar si el bacalao tradicional noruego está listo o no. Todo el proceso se basa en una experiencia y saber hacer que se han transmitido de generación en generación. No hay libros ni recetas que valgan; solo nuestros pallets, nuestro olfato y nuestras manos".